He abierto mi ventana y una bandada de palabras ha emprendido el vuelo buscando un lugar cálido donde vararse, donde tomar aliento para seguir el vuelo.Son palabras nómadas,sin patria; palabras que vuelan con el viento en el espacio sin fronteras de Internet.
Cuando pasen por tu jardín, no les niegues los frutos de tu árbol ni el agua de tu fuente, pero no intentes atraparlas. Déjalas seguir volando…
lunes, 23 de febrero de 2015
Tanka XXXII
Abraza el árbol como abraza el amante el cuerpo amado Poblado de sonidos que inundan el valle.
Cuando se abraza un árbol se liberan los sentidos y uno se llena de sensaciones hermosas.Con tu comentario me haces creer que tú también has gozado alguna vez de ese abrazo. Gracias por por compartir sentimientos. Un abrazo.
Tengo una especial relación con la Naturaleza; me gusta tocar la tierra, las plantas, la corteza de los árboles... y sentirme parte de ella. Gracias por tu comentario que tan bien se inserta en el poema.
ESTO SI ES POEMA Y HERMOSO... YO SOLO DIGO LAS COSAS QUE VIVO SIN ARTE DE SER POEMA NI MUCHO MENOS DEJO QUE TODO ME ENCUENTRE. LA FOTO MUSICA Y LETRAS Y SIN MAS EN UNA UNICA DIRECCION HACER SENTIR.
Gracias, Alberto. Me alegro de que sientas así el poema. Tú con tus fotografías y los comentarios que las acompañan, y yo con mis versos apoyados en imágenes que se compenetran con ellos, tenemos el mismo objetivo: trasmitir emociones, hacer sentir. Por eso me gustó encontrar tu blog y seguir tus pasos.
la fotografía es tan explícita que dan ganas de fundirse en ese abrazo y dejar que ese tronco, musculoso y feraz, nos dé cobijo. Y el tanka pone su voz para ilustrar el gesto de afecto compartido. Enhorabuena, poeta.
Hablas como si también tú hubieras abrazado un árbol. Seguro que sí, por tu poético sentir. Me gusta lo que tus palabras añaden de poesía esta entrada. Un abrazo arbóreo.
Eso de la moderación se presta a la duda; volví a activarla porque hay un usuario que no comenta sino que vuelca todo el teclado sin ton ni son para molestar.
Bueno, pero no te disculpes de tu doble comentario. Yo quedé encantada con la doble dosis.
Lo uno no impide lo otro. Hay personas que tienen en el corazón un bosque. ¡No seas tan drástico! Aunque, claro, si eres "salvaje"... Gracias. Un abrazo en la enramada.
Tú eres capaz de sentir gemidos y latidos del bosque. Lo has mostrado en tus versos, y es muy bonito saber que hay personas con las que podemos compartir sentimientos hacia la Naturaleza. Gracias, André. Un abrazo.
¡Muy bonito comentario, Marina! Sí, en el abrazo al árbol, están contenidos otros muchos que llegan a través del amor a la Naturaleza. Mis brazos abarcan a todos los amigos con los que he compartido días en la montaña.
Fanny, en un árbol viven los cantos y los sonidos, que nos mueven y conmueven...Un tanka entrañable, que nos pone en contacto con la naturaleza, amiga...Precisamente esta tarde he caminado a ver el almendro, que todos los años florece en un campo cercano a casa...Ya están brotando las primeras flores, dentro de una semana estará radiante...Abracemos al árbol es maestro y sabio y nos entrega su paz y su sabiduría. Mi felicitación y mi abrazo siempre, Fanny. M.Jesús
¡Qué fantástico tener de vecino a un almendro que no falta a la cita para cautivar el alma de quien lo mira! Yo veo, desde mi balcón un jardín y voy siguiendo la floración : primero la mimosa, luego un ciruelo y espero las flores blancas de un arbusto -para primeros de marzo- que no llego a ver cuál es. ¡Cuánta vida debemos a los árboles! ¡Cuánta belleza nos proporcionan!
¡Qué bien que te identifiques con el primer verso! Viviendo donde vives, no me extraña tu sensibilidad hacia la Naturaleza. Encontrar personas así me satisface mucho. Un abrazo.
Lo que cada uno siente es muy subjetivo. No creo en el poder de curación, como algunos místicos. A mí me emociona su belleza, muchas veces centenaria, sus raíces, la textura de su tronco, las lianas que lo trepan, su enramada frondosa... todo forma un conjunto que cautiva e invita a tocarlo, a abrazarlo...
Astrid, gracias por tu comentario. Dile a tu madre que comprendo perfectamente que abrace a los árboles.
Es que tú tienes contacto con la Naturaleza y no pasas por ella de cualquier forma.No hay más que ver tu blog.Seguro que también te has detenido a admirar un árbol y lo has abrazado. Gracias por tu comentario. Un abrazo.
Existen gentes que aún no sienten el alma del árbol cuando lo abraza (si es que lo llegan a hacer). Ahí reside la magia pues cuando una persona hace algo así ya es especial y receptiva, poco habrá que decirla para que abra los ojos de su propia alma. Besos.
Amigo del bosque: ¡qué decirte a ti que formas parte del bosque de personas que sentimos la Naturaleza! Gracias por prestarme tus brazos para poder abrazar árboles mucho más grandes que yo sola no puedo abarcar.
Un bello tanka sobre el amor a la naturaleza. Disculpa mi atrevimiento pero mMe ha parecido, no obstante, contar 6 sílabas fonéticas (no sé si se llaman a sí): quei-nun-dan-el-va-lle. Dónde me equivoco? Un abrazo.
¡Bien, Josep Mª! Me encanta tu interés no solo por el tema del tanka sino por su parte formal. El último verso tiene 6 sílabas, debido a la sinalefa que le resta una; me di cuenta, pero no me importó porque "inundan" era la palabra que sentí apropiada. Hubiera podido decir: " que recorren el valle"( 7 sílabas), pero no lo siento igual.
Me alegro de encontrarte por aquí y de saber que hay madres que enseñaron a sus hijos el amor a la Naturaleza. Gracias por tu comentario en el que siento que aprendiste y conservas las enseñanzas de tu madre.
Desde chicos habrían de inculcarnos ese maravilloso hábito ¡abrazar a los árboles, una sensación maravillosa! Les debemos tanto y pasamos como si ellos habrían de reverenciarnos. En fin. Estupenda entrada. Un beso.
Hola, Fanny, hacía tiempo que me pasaba por aquí. Me ha emocionado el sentimiento tan especial que transmiten tus palabras. Lo entiendo bien porque a mí personalmente me gusta abrazar el tronco de los árboles y hablo con las plantas en voz baja para que los vecinos no piensen que estoy loca. En mi pequeño jardín tengo un olivo centenario que hice traer de mi pueblo natal por el vínculo tan extraordinario que me une a él. Cuando estoy en horas bajas lo abrazo y le cuento mis penas y, por raro que pueda parecer, creo que me escucha y me ayuda. Me encanta celebrar bajo su sombra determinados acontecimientos. Besos
¡Hola, Mª José! Es verdad que hacía tiempo que no nos encontrábamos en nuestros blogs. No recibo las notificaciones de tus entradas y eso me despista. Oye, que me alegro de lo que dices, pues son sentimientos como los míos hacia la Naturaleza, y coincidir en eso es para mí muy importante.¡Qué sensibilidad hacia el olivo!; es emocionante. Nunca pensé que alguien lo haría formar parte de su equipaje en un traslado. Y que sepas que también hablo con mis plantas y me alegro cuando florecen o echan retoños.
Hola Fanny.. Me ha gustado mucho como has expresado la simbología del abrazo.. Para mi es la expresión mas espontanea de transmitir el cariño, el amor, la amistad.. También es cierto que como todo en la vida los hay sinceros y los hay interesados o falsos, pero quedémonos con los sinceros.... Un abrazo... de los sinceros..je..je.
¡Ah, Llorenç, llegaste, y como de costumbre para decirme palabras amables! Gracias, amigo. Sí, quedémonos con los abrazos sinceros, como el que se da a un árbol, todo natural.
Oye, observo que menguan los suspensivos; ahora son dos, aunque al final vuelven a estar todos los reglamentarios. ¿Has visto como te leo con atención?
Mi compañera tiene un largo historial como persona que abraza árboles mientras la miro. Creo que la entiendo un poco más leyéndote. Estos versos tiene que leerlos.
A ver si te unes a ese abrazo; no permanezcas solo mirando. Si este tanka te ha servido para convencerte de que tu compañera no está loca, o de que existen otros muchos locos... me encanta. Gracias. Un abrazo.
También al mar se le abraza con la mirada y cuando nos sumergimos en el agua como quien se entrega a los brazos del amante. Lo habrás notado en tu mar.
Gracias por volver a conectar. Un abrazo y feliz fin de semana.
Yo abrazo tus poemas, tantras, haikus, como si cada letra tuya fuera el amante de mi conciencia, el alimento de mi necesidad, y el aliento de mis jadeos.
Sigo sintiendo tus comentarios versos que escapan de tu alma y llegan a mí como un inesperado regalo. ¿O tal vez sí que lo esperaba? Sin cita previa, pero cuento contigo. Gracias, Mario, por sentir así.
Y en un abrazo sentir todo lo que hasta el momento se resistía uno a sentir o no lograba alcanzar.
ResponderEliminarAbrazar y abrazarse a uno mismo...
Un abrazo de luz
Cuando se abraza un árbol se liberan los sentidos y uno se llena de sensaciones hermosas.Con tu comentario me haces creer que tú también has gozado alguna vez de ese abrazo.
EliminarGracias por por compartir sentimientos.
Un abrazo.
Que hermoso querida Fanny, esa relación de ver el árbol como el cuerpo del ser amado que nos entrega seguridad, amor y fuerza de vida.
ResponderEliminarBesos
Tengo una especial relación con la Naturaleza; me gusta tocar la tierra, las plantas, la corteza de los árboles... y sentirme parte de ella.
EliminarGracias por tu comentario que tan bien se inserta en el poema.
Un abrazo.
También es un ser vivo y gracias a ellos, vivimos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, los árboles son seres vivos y como tales los respeto y amo.
EliminarGracias por detenerte a comentar.
Un abrazo.
ESTO SI ES POEMA Y HERMOSO... YO SOLO DIGO LAS COSAS QUE VIVO SIN ARTE DE SER POEMA NI MUCHO MENOS DEJO QUE TODO ME ENCUENTRE. LA FOTO MUSICA Y LETRAS Y SIN MAS EN UNA UNICA DIRECCION HACER SENTIR.
ResponderEliminarGracias, Alberto. Me alegro de que sientas así el poema.
EliminarTú con tus fotografías y los comentarios que las acompañan, y yo con mis versos apoyados en imágenes que se compenetran con ellos, tenemos el mismo objetivo: trasmitir emociones, hacer sentir. Por eso me gustó encontrar tu blog y seguir tus pasos.
Un abrazo.
la fotografía es tan explícita que dan ganas de fundirse en ese abrazo y dejar que ese tronco, musculoso y feraz, nos dé cobijo. Y el tanka pone su voz para ilustrar el gesto de afecto compartido. Enhorabuena, poeta.
ResponderEliminarCuando tengo tu comentario el poema se alumbra con tu sentir.Gracias, querido José Luis. Me gusta contar con tu opinión y con tu amistad.
EliminarUn abrazo.
No aprietes, que me detienes la savia
ResponderEliminar...Es para tomar la presión de tus latidos y cuidar tu corazón.
EliminarSalud, Noel.
desde que era niña lo hago
ResponderEliminarellos son mis Héroes Gaianos
abrazo
Me gusta encontrar personas que abrazan los árboles; siento esa proximidad que da el compartir sentimientos.
EliminarGracias por hacérmelo saber.
Un abrazo.
Abrazos al alma como fuertes caricias sentidas en el corazón.
ResponderEliminarUn beso.
Algo así se siente, María.
EliminarGracias por tu comentario y tu amistad.
Un abrazo.
Intenso el abrazo, el kaiku invita a seguir disfrutando de él, el abrazo y el poema.... gracias.
ResponderEliminar¡¡Bienvenido/a a mi blog!!
EliminarGracias por detenerte a comentar. Me alegro de que este "Tanka" no te haya dejado indiferente.
Saludos.
Sintiéndote segura.
ResponderEliminarMenos cuando hay tormenta; dicen que es peligroso refugiarse bajo un árbol.
EliminarGracias por tu visita, Tracy.
Saludos.
La energía que comunican en el abrazo es la suma de la tierra y el cielo, la unión de los latidos, esencia de la vida.
ResponderEliminarBss
Hablas como si también tú hubieras abrazado un árbol. Seguro que sí, por tu poético sentir.
EliminarMe gusta lo que tus palabras añaden de poesía esta entrada.
Un abrazo arbóreo.
En el abrazo al árbol se abraza la tierra y al cielo, la síntesis del latido de la vida del valle y de la cima de nubes coronada.
ResponderEliminarBss
Entre valles y cimas
Eliminarlos latidos del bosque
sintetizan la vida
y quiero en el abrazo
regresar aquellos días
en que los árboles cantaban.
Me sigues inspirando, artista. Gracias por tus poéticos comentarios.
Un abrazo ramificado.
Creí, cosa de la moderación de comentarios, que no se había publicado mi primer comentario....de ahí el segundo tan parecido al primero :)))
EliminarEso de la moderación se presta a la duda; volví a activarla porque hay un usuario que no comenta sino que vuelca todo el teclado sin ton ni son para molestar.
EliminarBueno, pero no te disculpes de tu doble comentario. Yo quedé encantada con la doble dosis.
Adoro los árboles.
ResponderEliminarMe gustan mucho más que las personas.
Besos.
Lo uno no impide lo otro. Hay personas que tienen en el corazón un bosque.
Eliminar¡No seas tan drástico! Aunque, claro, si eres "salvaje"...
Gracias.
Un abrazo en la enramada.
El árbol se puebla de escalofríos...
ResponderEliminarY quien da el abrazo también.Hay árboles centenarios que sobrecogen de emoción.
EliminarGracias por pasarte por aquí y dejar un comentario.
Un abrazo.
Precioso Tanka, Fanny y con el contenido propio de ellos. Fantástico!
ResponderEliminarUn beso :)
¡Ah, mi amigo artista!, ¡cuánto me gusta encontrarte!
EliminarGracias por tu elogioso comentario.
Un abrazo.
Hasta mí llegan los gemidos de un árbol amante, llenos de ritmo
ResponderEliminarBesos
André
Tú eres capaz de sentir gemidos y latidos del bosque. Lo has mostrado en tus versos, y es muy bonito saber que hay personas con las que podemos compartir sentimientos hacia la Naturaleza.
EliminarGracias, André.
Un abrazo.
Quizas viendo ese abrazo recordemos alguno sentido solo en el pensamiento.
ResponderEliminarBesos para ti Fanny
¡Muy bonito comentario, Marina! Sí, en el abrazo al árbol, están contenidos otros muchos que llegan a través del amor a la Naturaleza. Mis brazos abarcan a todos los amigos con los que he compartido días en la montaña.
EliminarGracias por tus palabras amigas.
Un abrazo.
Los árboles son generosos, se merecen un abrazo. Y si tuvieran oído les gustaría tu tanka
ResponderEliminarDesde luego que sí son generosos. Nos proporcionan bastante más que belleza; son vitales.
EliminarGracias por tu comentario y por el simpático final. ¿Seguro que no yen los árboles?...No sé, no sé...
Un abrazo.
Fanny, en un árbol viven los cantos y los sonidos, que nos mueven y conmueven...Un tanka entrañable, que nos pone en contacto con la naturaleza, amiga...Precisamente esta tarde he caminado a ver el almendro, que todos los años florece en un campo cercano a casa...Ya están brotando las primeras flores, dentro de una semana estará radiante...Abracemos al árbol es maestro y sabio y nos entrega su paz y su sabiduría. Mi felicitación y mi abrazo siempre, Fanny.
ResponderEliminarM.Jesús
¡Qué fantástico tener de vecino a un almendro que no falta a la cita para cautivar el alma de quien lo mira! Yo veo, desde mi balcón un jardín y voy siguiendo la floración : primero la mimosa, luego un ciruelo y espero las flores blancas de un arbusto -para primeros de marzo- que no llego a ver cuál es.
Eliminar¡Cuánta vida debemos a los árboles! ¡Cuánta belleza nos proporcionan!
Gracias, amiga. Comparto contigo sentimientos importantes.
Un abrazo.
Es tanta la energía que se nota al abrazar un árbol que, como bien dices,parece que se abrza el cuerpo de la persona amdada....
ResponderEliminarUn abrazo...:-)
Sí, es muy emocionante; gracias por tu comentario que me hace sentir que tenemos algo en común.
EliminarUn abrazo.
"...Abraza el árbol..." Ya es bastante elocuente ese primer verso con el que me identifico.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Qué bien que te identifiques con el primer verso! Viviendo donde vives, no me extraña tu sensibilidad hacia la Naturaleza. Encontrar personas así me satisface mucho.
EliminarUn abrazo.
Eso lo suele hacer mi madre, que es muy mística y eso. Dice que sienta bien.
ResponderEliminarLo que cada uno siente es muy subjetivo. No creo en el poder de curación, como algunos místicos. A mí me emociona su belleza, muchas veces centenaria, sus raíces, la textura de su tronco, las lianas que lo trepan, su enramada frondosa... todo forma un conjunto que cautiva e invita a tocarlo, a abrazarlo...
EliminarAstrid, gracias por tu comentario. Dile a tu madre que comprendo perfectamente que abrace a los árboles.
Un abrazo.
Los abrazos son puro sentimiento, la piel se mezcla con la piel y abarca todos los sentidos, me gusta mucho. Gracias.
ResponderEliminarEs que tú tienes contacto con la Naturaleza y no pasas por ella de cualquier forma.No hay más que ver tu blog.Seguro que también te has detenido a admirar un árbol y lo has abrazado.
EliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo.
Existen gentes que aún no sienten el alma del árbol cuando lo abraza (si es que lo llegan a hacer).
ResponderEliminarAhí reside la magia pues cuando una persona hace algo así ya es especial y receptiva, poco habrá que decirla para que abra los ojos de su propia alma.
Besos.
Amigo del bosque: ¡qué decirte a ti que formas parte del bosque de personas que sentimos la Naturaleza!
EliminarGracias por prestarme tus brazos para poder abrazar árboles mucho más grandes que yo sola no puedo abarcar.
Un abrazo.
Un bello tanka sobre el amor a la naturaleza.
ResponderEliminarDisculpa mi atrevimiento pero mMe ha parecido, no obstante, contar 6 sílabas fonéticas (no sé si se llaman a sí): quei-nun-dan-el-va-lle.
Dónde me equivoco?
Un abrazo.
¡Bien, Josep Mª! Me encanta tu interés no solo por el tema del tanka sino por su parte formal. El último verso tiene 6 sílabas, debido a la sinalefa que le resta una; me di cuenta, pero no me importó porque "inundan" era la palabra que sentí apropiada. Hubiera podido decir: " que recorren el valle"( 7 sílabas), pero no lo siento igual.
EliminarGracias, amigo. Me ha gustado tu observación.
Un abrazo.
Preciosa esta imagen y cuanto representa. Un abraqzo.
ResponderEliminarHola, Pedro.Gracias por pasarte por aquí. Sé que puedo compartir contigo este interés por la Naturaleza.
EliminarUn abrazo.
Mi madre me enseñó a abrazar así a los árboles. Maravilloso tanka, Fanyy, MARAVILLOSO.
ResponderEliminarMe alegro de encontrarte por aquí y de saber que hay madres que enseñaron a sus hijos el amor a la Naturaleza.
EliminarGracias por tu comentario en el que siento que aprendiste y conservas las enseñanzas de tu madre.
Un abrazo.
Desde chicos habrían de inculcarnos ese maravilloso hábito ¡abrazar a los árboles, una sensación maravillosa! Les debemos tanto y pasamos como si ellos habrían de reverenciarnos. En fin. Estupenda entrada. Un beso.
ResponderEliminarGracias, Julio. Tocar, abrazar, apreciar su textura, su olor... es algo lleno de sensaciones.
EliminarUn placer saber que te ha gustado esta entrada.
Un abrazo.
Realmente se puede tener un romance con la naturaleza... y sería el más hermosos de todos los posibles. Incluso la banda sonora sería perfecta!! :)
ResponderEliminarUn abrazo grande, Fanny.
Lo mejor es un romance en la Naturaleza ,con su banda sonora de fondo.
EliminarMuy simpático tu comentario, Julia. Gracias por pasarte por aquí.
Un abrazo.
Hola, Fanny, hacía tiempo que me pasaba por aquí.
ResponderEliminarMe ha emocionado el sentimiento tan especial que transmiten tus palabras. Lo entiendo bien porque a mí personalmente me gusta abrazar el tronco de los árboles y hablo con las plantas en voz baja para que los vecinos no piensen que estoy loca. En mi pequeño jardín tengo un olivo centenario que hice traer de mi pueblo natal por el vínculo tan extraordinario que me une a él. Cuando estoy en horas bajas lo abrazo y le cuento mis penas y, por raro que pueda parecer, creo que me escucha y me ayuda. Me encanta celebrar bajo su sombra determinados acontecimientos.
Besos
¡Hola, Mª José! Es verdad que hacía tiempo que no nos encontrábamos en nuestros blogs. No recibo las notificaciones de tus entradas y eso me despista.
EliminarOye, que me alegro de lo que dices, pues son sentimientos como los míos hacia la Naturaleza, y coincidir en eso es para mí muy importante.¡Qué sensibilidad hacia el olivo!; es emocionante. Nunca pensé que alguien lo haría formar parte de su equipaje en un traslado. Y que sepas que también hablo con mis plantas y me alegro cuando florecen o echan retoños.
Un abrazo y ¡¡felices locuras botánicas!!
Hola Fanny.. Me ha gustado mucho como has expresado la simbología del abrazo.. Para mi es la expresión mas espontanea de transmitir el cariño, el amor, la amistad.. También es cierto que como todo en la vida los hay sinceros y los hay interesados o falsos, pero quedémonos con los sinceros....
ResponderEliminarUn abrazo... de los sinceros..je..je.
¡Ah, Llorenç, llegaste, y como de costumbre para decirme palabras amables! Gracias, amigo. Sí, quedémonos con los abrazos sinceros, como el que se da a un árbol, todo natural.
EliminarOye, observo que menguan los suspensivos; ahora son dos, aunque al final vuelven a estar todos los reglamentarios. ¿Has visto como te leo con atención?
Un abrazo arbóreo.
Mi compañera tiene un largo historial como persona que abraza árboles mientras la miro. Creo que la entiendo un poco más leyéndote. Estos versos tiene que leerlos.
ResponderEliminarA ver si te unes a ese abrazo; no permanezcas solo mirando. Si este tanka te ha servido para convencerte de que tu compañera no está loca, o de que existen otros muchos locos... me encanta.
EliminarGracias. Un abrazo.
Los abrazos a la tierra, nos regresan las raíces de lo que fuimos y somos, algo más efímero que el tronco de un árbol, pero con más libertad.
ResponderEliminarMuy bello. Un beso
En la Naturaleza sentimos que no somos lo más fuerte; sentimos su grandeza y nuestra fragilidad.
EliminarUn bello comentario. Gracias, Albada.
Un abrazo.
Fanny uufff me llegó al alma tu verso que belleza y la foto uufff me encantó!! si además cierto , un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarTambién al mar se le abraza con la mirada y cuando nos sumergimos en el agua como quien se entrega a los brazos del amante. Lo habrás notado en tu mar.
EliminarGracias por volver a conectar.
Un abrazo y feliz fin de semana.
Como el abrazo que inunda el corazón de amor. Precioso !! besos
ResponderEliminarAsí es para quienes amamos la Naturaleza.Gracias por dejarme tu sentir.Me alegro de poder contar contigo.
EliminarUn abrazo.
es una sensación única
ResponderEliminarabrazos para ti
¡¡Bienvenida a mi blog, Marga!! Me gusta encontrar personas que sienten la Naturaleza.
EliminarUn abrazo.
Ese abrazo a la naturaleza siempre nos concede vida. Un fuerte abrazo, Fanny
ResponderEliminarGracias, Alfredo. Buen fin de semana.
EliminarUn abrazo.
Yo abrazo tus poemas, tantras, haikus, como si cada letra tuya fuera el amante de mi conciencia, el alimento de mi necesidad, y el aliento de mis jadeos.
ResponderEliminarGracias por estos momentos.
Abrazo.
Mario
Sigo sintiendo tus comentarios versos que escapan de tu alma y llegan a mí como un inesperado regalo. ¿O tal vez sí que lo esperaba? Sin cita previa, pero cuento contigo. Gracias, Mario, por sentir así.
EliminarUn abrazo.