He abierto mi ventana y una bandada de palabras ha emprendido el vuelo buscando un lugar cálido donde vararse, donde tomar aliento para seguir el vuelo.Son palabras nómadas,sin patria; palabras que vuelan con el viento en el espacio sin fronteras de Internet. Cuando pasen por tu jardín, no les niegues los frutos de tu árbol ni el agua de tu fuente, pero no intentes atraparlas. Déjalas seguir volando…
miércoles, 22 de enero de 2014
Espumas ilusorias
Tenía impaciencia por oírle,
tenía una urgencia por hablarle,
y el rumor que se alzaba desde el sueño
era el mar, que traía olas
de espumas ilusorias.
Recorrí recónditos rincones del viento
para encontrar su voz huída,
removí la arena de la playa
aun sabiendo que nunca devuelve lo perdido.
Busqué en lo más enmarañado de su pecho,
y solo hallé silencios.
Y ya no sueño amor
porque no hay sueño bastante
a su vacío.
Mayo,2013
Foto de mi archivo:
Estepona, 2011
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Hermoso poema donde prima la belleza de mar y tu nostalgia
ResponderEliminarTus reproches llevan el estigma de anhelos perdidos expresados con inusitada belleza.
Besos.
André
Eres muy amable, André. Todo te gusta y regalas palabras positivas que me dan alegría.
EliminarTe dejas sentir; muchas gracias.
Un abrazo
di que sí
ResponderEliminarYes, oui, ja...
Eliminar¿Así?
Inmenso vacío y menor deseo.
ResponderEliminarMe parece muy acertado poema.
Felicidades
Así son: inversamente proporcionales.
EliminarGracias, por tu visita y felicitación.
Bona nit.
Hola
ResponderEliminarVengo del blog de FG.
El mar inspirador de tantos versos únicos, de tanta nostalgia y amor. Ese halo de soledad que todo lo envuelve nos lleva a sentir las pérdidas o los encuentros de una manera diferente y especial.
Precioso poema.
Me quedo en este cálido blog y te invito al mío, si quieres. Acá tengo muchos amigos, de eso se trata, somos una gran familia.
lujanfraix.blogspot.com
Un beso.
Te doy la bienvenida, Luján. Gracias por tu visita y comentario.No hay poeta que no le haya dedicado al mar un poema, y es que al contemplarlo se nos vuelve metáfora de los vaivenes de la vida y de sus cambios de color.
EliminarGracias por tu invitación; me pasaré a leerte.Me gusta conocer a la gente y lo que escribe es el espejo de su personalidad.
Saludos.
Sucede que con alguna frecuencia el mar aparece en tus poemas, siempre con cierto sentido nostálgico. Puede ser entonces que Ismael, el personaje de Moby Dick, tenga razón cuando pregunta: ¿Por qué los antiguos persas consideraban sagrado el mar? ¿Por qué los griegos le dieron una divinidad aparte, un hermano del propio Júpiter?. El mar ejerce una verdadera atracción, observamos las olas como esperando que nos traigan algo, tal vez lo hacen, nos traen a nosotros mismos, a nuestros sueños y a nuestras ilusiones.
ResponderEliminarPoesía pura tu comentario, Jenofonte. El mar tiene muchos simbolismos, tantos como los estados en que se nos muestra.Por eso, a veces nos inspira nostalgia, otras,emociones turbulentas,otras, naufragios,otras cantos de amor, sueños que llegan a la playa o se alejan, a la deriva... ¡y tantas otras emociones!.
EliminarEncuentro más inspiración en el campo porque es más diverso y porque son los paisajes de mi infancia ,de mi juventud y de ahora mismo.
Me gustan las referencias literarias que incluyes en tu comentario; es algo muy tuyo y demuestra que eres un buen lector.
Gracias.
Un abrazo.
Debemos soñar siempre, aun cuando parezca que no merece la pena.
ResponderEliminarUn abrazo.
No paro de soñar, Rafael. Y si despierto, vuelvo a soñar...
EliminarUn abrazo.Gracias por tu visita.
Espumas ilusorias que dejan un gran dolor en el corazón inundándose los ojos de mar salado de lágrimas.
ResponderEliminarUn beso.
Gracias por tu visita y comentario, María.
Eliminar...y cuando la espuma se diluye, vuelvo a ver los azules del mar.
Un abrazo.
En el mar se pierden las voces de un ayer que vuelve con insistencia, y el recuerdo es el equipaje que se lleva encima sin poder dejarlo a un lado. No siempre el mar trae los deseos, en ocasiones más bien nos arrebata los mejores sueños. Estas espumas ilusorias van vestidas de tristeza.
ResponderEliminarBesos!
Bonito comentario, FG. ¡Cuántas cosas podemos decir del mar! Y también esperar, porque es cambiante y porque devuelve a la playa lo que arrebata.
EliminarUn placer leer tus comentarios. Muchas gracias.
Un abrazo.
Siempre hay otras playas, otro mar, otros rincones.
ResponderEliminarCuando el silencio agobia, hay que gritar al viento para oír otras voces, aunque sea solo el eco.
Este verso es terrible : " Y ya no sueño amor...", porque es aceptar una derrota.
Y no hay nada ni nadie por lo que merezca la pena sentir así.Un desengaño es solo un aprendizaje...
Un placer leerte Fanny.
Abrazos.
Bueno, el caso es que ,yo, personalmente, sigo "soñando amor" porque soy tozuda, pero el poema refleja otras realidades.Cuando escribo, mezclo realidad y fantasía: soy yo y los otros, o el otro.
EliminarPor otra parte, aceptar la derrota en una batalla concreta, no quiere decir que no se esté dispuesto a librar otras.
Pero la peor batalla es contra el silencio y sus ambigüedades y de este tema tengo muchos poemas porque esas conductas no las entiendo.
Jerónimo, me gusta que vengas y me dejes unas palabras. Muchas gracias.
Un abrazo