He abierto mi ventana y una bandada de palabras ha emprendido el vuelo buscando un lugar cálido donde vararse, donde tomar aliento para seguir el vuelo.Son palabras nómadas,sin patria; palabras que vuelan con el viento en el espacio sin fronteras de Internet.
Cuando pasen por tu jardín, no les niegues los frutos de tu árbol ni el agua de tu fuente, pero no intentes atraparlas. Déjalas seguir volando…
domingo, 14 de septiembre de 2014
Sanguina
Naranja sanguina. Foto tomada de Internet.
Al primer corte, brilla el rojo sanguina en el cuchillo.
Hola ...aqui si... con la sanguina y el cuchillo estoy perdida...lo unico que para la sed ...vale y tambien puede ser sed de amor. Bebos Fanny para ti Marina
De este haiku , escribí dos versiones; publiqué esta porque la sugerencia se presta a que la imaginación del lector tenga más posibilidades de completar el instante, como tú has hecho. ¡Me encantó! Gracias.
En el interior está la belleza y también, a veces, la sorpresa. En este caso, no hay sorpresa pero la belleza está por todas partes. Tan breve y tan bien hallado. Un saludo.
No veía naranjas sanguinas desde hace muchos, muchísimos años, pensé que habían desaparecido en aras a la productividad. Eran muy buenas para hacer zumo. Celebro reencontrarlas.
Hola, Elda. Volvemos a comunicarnos y eso me gusta.
Como dices, la imaginación del lector, puede jugar con este haiku y visualizar instantes diferentes.No sé si es ortodoxo la ambigüedad en el haiku, pero, de entrada me salió así. Luego escribí una versión más ajustada a las naranjas, pero es interesante ver hacia donde va la fantasía del lector.
Fanny, muy inteligente y sugerente ese haiku...Ese primer corte lo sentimos en la piel...y el rojo sanguina de la naranja grita ante nuestros ojos, como sangre viva...Te ha quedado redondo el post imagen y letras, amiga...Muy bello y artístico. Mi felicitación y mi abrazo inmenso por tu constante creatividad y buen hacer. Feliz semana, Fanny. M.Jesús
Me alegro de que te guste este haiku, a pesar de su ambigüedad, que, como he dicho, ignoro si es correcta en un buen haiku, pero encuentro curiosas las interpretaciones.
Me quedo varado en ese primer corte. No te cortes, sigue escribiendo, arribas donde casi nadie alcanza con este menesteroso arte de la escritura. Mi gratitud.
Ya sé que es un decir, pero ¡que bien me suenan tus palabras!. Gracias, Mario. Nada que agradecerme. Soy yo quien agradezco, muy sinceramente,tu paseo amistoso por mi blog y las huellas de colores que dejas con tus palabras.
Hola ...aqui si... con la sanguina y el cuchillo estoy perdida...lo unico que para la sed ...vale y tambien puede ser sed de amor.
ResponderEliminarBebos Fanny para ti
Marina
Bueno, un zumo de naranja sanguina es estupendo para la sed, pero si es sed de amor...no sé, no sé.
EliminarGracias por tu comentario, Marina.
Es increíble qué bien ordenas las palabras, para una descripción así, casi me duele la piel O_O
ResponderEliminarUn beso Fanny
De este haiku , escribí dos versiones; publiqué esta porque la sugerencia se presta a que la imaginación del lector tenga más posibilidades de completar el instante, como tú has hecho. ¡Me encantó!
EliminarGracias.
Un abrazo.
Cuando era pequeña no podía ni verlas.
ResponderEliminar¿Y ahora? Se ven menos en los mercados, pero cuando hay, compro. ¡¡Ese zumo rojo!!...
EliminarYo, en cambio ,tengo un buen recuerdo de mi infancia , precisamente por ese rojo intenso tan llamativo.
Gracias por comentar.
Y las pupilas....gustativas se afilan
ResponderEliminarJuegas con las palabras y queda muy expresivo, pues gustan también a simple vista. ¡Muy ingenioso, Noel !!
EliminarBona nit.
Como diría Lorca: "Qué perfume de flor de cuchillo!
ResponderEliminarBss
Gracias por tu lorquiano comentario.
EliminarUn abrazo.
En el interior está la belleza y también, a veces, la sorpresa. En este caso, no hay sorpresa pero la belleza está por todas partes. Tan breve y tan bien hallado.
ResponderEliminarUn saludo.
¡Bien hallado, digo yo al encontrarte por aquí!.
EliminarGracias, Josep Mª.
Un abrazo.
No veía naranjas sanguinas desde hace muchos, muchísimos años, pensé que habían desaparecido en aras a la productividad. Eran muy buenas para hacer zumo. Celebro reencontrarlas.
ResponderEliminarUn abrazo.
¿Pero no vas al mercado? En junio compré unas buenas sanguinas; preciosas de color y de agradable acidez.
EliminarGracias, Pedro. Siempre me gusta encontrarte.
Un abrazo.
Con el primer corte sí, quizás el segundo ya, "llueve sobre mojado"...
ResponderEliminarMe ha encantado porque puede tener más interpretaciones.
Un abrazo.
Hola, Elda. Volvemos a comunicarnos y eso me gusta.
EliminarComo dices, la imaginación del lector, puede jugar con este haiku y visualizar instantes diferentes.No sé si es ortodoxo la ambigüedad en el haiku, pero, de entrada me salió así. Luego escribí una versión más ajustada a las naranjas, pero es interesante ver hacia donde va la fantasía del lector.
Un abrazo.
Fanny, muy inteligente y sugerente ese haiku...Ese primer corte lo sentimos en la piel...y el rojo sanguina de la naranja grita ante nuestros ojos, como sangre viva...Te ha quedado redondo el post imagen y letras, amiga...Muy bello y artístico.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo inmenso por tu constante creatividad y buen hacer.
Feliz semana, Fanny.
M.Jesús
Me alegro de que te guste este haiku, a pesar de su ambigüedad, que, como he dicho, ignoro si es correcta en un buen haiku, pero encuentro curiosas las interpretaciones.
EliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo.
Hola Fanny... El primer corte es el que vale, el que te sorprende, el que cautiva... Un abrazo...
ResponderEliminarDepende del cuchillo y de la maestría en el arte de cortar. Eso dicen.
EliminarDivago con el juego que me ofrecen tus palabras.
Gracias por ello.
Un abrazo.
Me quedo varado en ese primer corte. No te cortes, sigue escribiendo, arribas donde casi nadie alcanza con este menesteroso arte de la escritura. Mi gratitud.
ResponderEliminarMario
Ya sé que es un decir, pero ¡que bien me suenan tus palabras!. Gracias, Mario.
EliminarNada que agradecerme. Soy yo quien agradezco, muy sinceramente,tu paseo amistoso por mi blog y las huellas de colores que dejas con tus palabras.
Un abrazo.