Entré una primavera en un jardín
y en él quedó el amor adormecido
en un rincón,bajo ramas floridas,
acunado con una canción inacabada.
La fuente teje un canto delicado
unido al rumor del aire entre los pinos,
penetra en mí en secreto y en él
te oigo y amo sin futuro.
Bien lo sabe la fuente que, tantas veces,
calmó la sed de los enamorados:
el amor es agua... agua
imposible de beber sin mojarse los labios.
Una canción inacabada suena en mi alma,
a flor de piel, a flor de labios, te murmura:
No te olvido.
No me olvides.
junio 2013
OOOOOOHHHHHHHHHHHH!!!!!!
ResponderEliminarAcabo de ver el aviso de tu publicación, y lo he leído una vez y otra y otra, qué hermosa poesía, qué dulce y delicado es el canto del amor que es como el agua, siempre presente aun siendo un recuerdo inolvidable.
PRECIOSO!!!
FG, me encanta tu forma de comentar porque me laten tus palabras.Gracias, amiga; tenemos sensibilidades afines y es maravilloso que desde puntos distantes tengamos esta buena sintonía.
EliminarUn abrazo.
No te olvido ni me olvides, parece que dice el agua de la fuente si escuchamos atentamente.
ResponderEliminarUn abrazo.
Eso es lo que dice, Rafa.El recuerdo es la retaguardia del amor.
EliminarUn abrazo.
es muy bella esta canción...salu2
ResponderEliminar¡Bienvenido, Francisco! Gracias por tu visita y por tus amables palabras. Espero que vuelvas si tienes tiempo.Me gustaría.
EliminarSalud y poesía.
Veo que no has perdido ni un átomo de sensibilidad. Eres fantástica y me llena de orgullo el haberte conocido.
ResponderEliminarTe leo y te releo, siempre sonriendo, pues más que un soplo de aire fresco, eres el oxígeno más puro.
Un abrazo de tu amigo Pepe.
Al fin llegas y sabes que te recibo con mucha alegría. En este blog hay un poema dedicado a ti y otro inspirado en algo que me contaste.
EliminarEs increíble que, sin conocernos personalmente, se haya creado una franca amistad.
Gracias por tus cariñosas palabras, Pepe. Me diste una fantástica sorpresa.
Un abrazo.