He abierto mi ventana y una bandada de palabras ha emprendido el vuelo buscando un lugar cálido donde vararse, donde tomar aliento para seguir el vuelo.Son palabras nómadas,sin patria; palabras que vuelan con el viento en el espacio sin fronteras de Internet.
Cuando pasen por tu jardín, no les niegues los frutos de tu árbol ni el agua de tu fuente, pero no intentes atraparlas. Déjalas seguir volando…
Sí, y las colillas, y los papeles de gente incívica tiene como consecuencia que la belleza natural sea aplastada por las ruedas del tractor.Un cambio de huellas que no me gusta. Un abrazo y gracias. Acabo de visitar tu blog.
Una buena observación, el hombre y sus artilugios no puede acabar con toda la belleza natural, como esa espumosa ola que se renueva una y otra vez. Me alegro de que me visites.Gracias. Un abrazo.
Las algas tienen la culpa.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sí, y las colillas, y los papeles de gente incívica tiene como consecuencia que la belleza natural sea aplastada por las ruedas del tractor.Un cambio de huellas que no me gusta.
EliminarUn abrazo y gracias. Acabo de visitar tu blog.
..Y la espuma de las olas permanece
ResponderEliminarBesos
André
Una buena observación, el hombre y sus artilugios no puede acabar con toda la belleza natural, como esa espumosa ola que se renueva una y otra vez.
EliminarMe alegro de que me visites.Gracias.
Un abrazo.
Me encanta el haiku...
ResponderEliminarUn abrazo, Fanny
Tú sabes lo que es un haiku, María, por eso lo aprecias y no sabes cuánto me alegra.Gracias.
EliminarUn abrazo