Para seguir existiendo
mis versos necesitan
tu mirada y tu palabra.
Necesitan sentirte hospitalario,
saber que tú los sientas a tu mesa,
conversas con ellos un instante,
los prestas tu voz y encuentras en ellos
mi sentir, que a ti te habla.
Sin ti mis versos quedan huérfanos.
Son fruto vano, primavera sin flores,
verano sin pájaros, otoño sin colores,
nieve perpetua del invierno.
¿Qué sentido tendría abrir el alma
al frío de la nada?...
Es a ti a quien me entrego en estos versos;
me entrego a tu mirada y a tu alma
y el aliento recobro en tu palabra.
Agosto,2011
Un poema que da al lector una importancia primordial;
ResponderEliminarMe gusta mucho la personalización que haces del poema que necesita que lo "sienten a la mesa, que conversen con él, que le presten la voz de un lector hospitalario". Me encantó esta ausencia de ego, que pierde a muchos poetas, y que encuentres en las palabras del lector el aliento para seguir adelante.
Siempre que pueda vendré a dejarte unas palabras.
Gracias por el tiempo que hoy me has dedicado; veo que has comentado varios poemas y eso no es frecuente.Siempre hay prisas y uno no pasa del umbral, así que eres una excepción que agradezco mucho.
EliminarLo que expreso en el poema, es lo que siento.La escritura es una forma de comunicación y, si es poesía, lo que se comunica son sentimientos y, como tales, necesitan la mirada y la palabra del otro.
He comprobado que muchos blogs mueren cuando pasa el tiempo sin que nadie se haya detenido a comentar. La comunicación con el lector es indispensable.
Agradezco, muy sinceramente, "que invites a tu mesa a mis poemas". Gracias por tu hospitalidad, Celeste.
Saludos.