Cercis ciliquastrum/Árbol del amor. Foto de mi archivo. |
Se me ramificó el corazón
y, en cada rama, el tiempo
ha ido tejiendo un nido
con distintas hebras,
de distintos colores,
de distintas formas,
de distintos tamaños...
Cuando creo estar sola,
de los nidos despiertan voces
que inundan el corazón
con sus canciones.
Y me cantan los ojos,
me cantan los oídos,
me canta la boca...
El aire se llena de música coral
y todo lo diverso es uno
en mi corazón.
Foto tomada de Internet |
Y los cantares de tus versos y en cada rama de tu corazón vas tejiendo las distintas hebras te todo lo diverso que vive enti
ResponderEliminar¡Hermoso!
André!
En las ramas del árbol de nuestra vida, hay gente que ha ido tejiendo vínculos; gente muy diversa que aportaron savia al árbol,y eso hace que nunca estemos solos. La voz de cada uno se integra en un canto coral que reconforta.
EliminarGracias por unir tu voz a la de tanta gente que canta en mi corazón.
Un abrazo.
Creo que la vida siempre es hermosa y es tan corta ...precioso arbol de tu vida y hermosas ramas que te dan compañia y musica para deleite del alma...buenas noches
ResponderEliminarbesossssFanny
Muy bonito comentario, amiga Marina. Seguro que en ti también hay voces que te cantan y te hacen compañía.
EliminarUn abrazo.
Un corazón florido
ResponderEliminar...como el tuyo, Noel.
EliminarBona nit.
Describes un árbol cargado de sentimiento, todo lo que vive en ti nos traslada también allí. Saludos y enhorbuena
ResponderEliminar¡Bienvenida a mi blog! Me alegro de que hayas llegado hasta aquí.Tal vez llegaste con el vuelo de esa mariposa azul. Gracias por expresarme tu sentir.
EliminarMe gustaría que no fuera la última vez que me visitas.
Saludos.
Es muy bonito lo que expresa este poema: un corazón grande, generoso, con cabida para muchos cariños. Siempre he pensado esto: conforme se van ensanchando nuestros afectos, se hace más hueco para que entren más. Pero tú lo has dicho de forma más hermosa.
ResponderEliminarUn abrazo, Fanny.
Isabel, es eso, precisamente. En un corazón cabe el afecto de muchas personas que pasaron y pasan por nuestra vida dejándonos huella.Todas ellas son la savia que alimenta el árbol de la vida.
EliminarGracias por tu bonito comentario.
Un abrazo.
Tus palabras volarán, cantando, de cada una de tus ramificaciones , y tus melodías estallarán en flores.
ResponderEliminarMuy bello Fanny
Besos
Isa
Muy poético, Isa Iss. "Melodías que estallan en flores"... Esta frase me llega al alma. Muchas gracias por regalarme la belleza de tu voz.
EliminarUn abrazo.
Música que llena los sentidos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Rafa. A ver si con esta música te procuro un feliz sueño.
EliminarUn abrazo.
Hola Fanny... Los arboles tienen algo especial, nacen , crecen hacia el cielo, se reproducen multiplicando sus ramas, crean vida en primavera, y todo ello al tiempo que cada vez echan mas raines y cada vez mas profundas, mientras el aire aveces los azota y otras veces los mece.
ResponderEliminarToda una lección de la vida.....
Un abrazo.....
Hola, Llorenç. Sé que te gustan los árboles y que el tuyo tiene numerosas ramas crecidas con la amistad que regalas a los demás.
EliminarUn abrazo.
En tu corazón convergen mis voces lindas Fanny!!!
ResponderEliminarEl árbol de la vida crece y se hace frondoso, con las voces amigas que llegan y se quedan con nosotros.
EliminarGracias por unir tu voz a este canto coral que me llena de dicha.
Hoy vuelo a tu árbol con la dicha de saber, que al cantar en tu rama mi voz resonará en tu corazón, te sentirás agradecida y te abrirás a la luz, sabiendo que no estás sola, sino unida a todos, respirando y sintiendo la vida en plenitud...Bello y simbólico poema, que nos traslada al espíritu de la naturaleza, donde hallamos la lección y la sabiduría para seguir ensayando el vuelo. Mi felicitación y mi abrazo grande,Fanny.
ResponderEliminarM.Jesús
¡Qué belleza de comentario, Mª Jesús. Tocaste mi árbol con tu varita mágica y sentí que brotaba una rama y llegaba presuroso un pájaro para anidar en ella. Reconozco tu voz en su canto. Gracias por tu amistad.
EliminarUn abrazo.
¡Quién fuera pájaro, quien fuera nido para trinar quedo junto a tu oído!
ResponderEliminarPre-cio-so.
Gracias, Luis, por tus poéticas palabras que, como otras veces, recibo muy sensiblemente.
EliminarCon menos acierto poético, pero con afecto, te respondo con estos versitos:
Hay un nido de barro
en una rama,
y un pájaro de luz
que canta al alba.
¡Ay, dios!
¡Que no se quiebre esta rama!
Un abrazo.
Wowww.!!!! Sacado de la más pura lírica tradicional, llevas una juglaresa en el alma. Nunca me habían dedicado unos versos, y aunque lo hubieran hecho, estos serían los más hermosos. Mil gracias.
EliminarBsss
Me alegro de que los hayas recibido con tanto agrado. Me inspiraste, Luis.
EliminarUn abrazo.
Tan grande lo tienes que esparces tus letras entre todos. Saludos.
ResponderEliminarEso quiero, Nel. Hacer frondoso mi árbol con vuestras voces prendidas de mis ramas.
EliminarGracias por tu compañía. Un amistoso abrazo.
Un árbol con tantas ramas, como rebordes tiene tu corazón.
ResponderEliminarQue el trino melodioso de esas aves te envuelvan siempre.
¡Nunca dejes de amar!
Un abrazo
Bonito comentario, Musa. Y crece y crece el árbol de mi vida con tu amistad. Muy agradecida por tu compañía.
EliminarUn abrazo.
Hay árboles con nombres poéticos, y calles, y personas. ¡Me encantan!
ResponderEliminarUn abrazo.
A este árbol de la foto, se le llama también "Árbol de Judea", pero a mí me gusta más "árbol del amor".
EliminarGracias, Pedro.
Un abrazo.
Y cuando comprendes que Todo es uno, ese árbol de tu corazón es tan bello como en tus versos. Felicidades, Fanny, un fuerte abrazo.
ResponderEliminarTodo lo vivido, por contradictorio que sea, forma un grandioso árbol de la vida, tan frondoso como hayamos sabido cultivarlo.
EliminarGracias por tu comentario, que me ha gustado mucho.
Un abrazo.
Por eso quienes un gran corazón son tan felices.
ResponderEliminarUn poema precioso.
Un abrazo.
El gran corazón es el que tiene una amplia enramada donde cantan voces con distintos acentos.
EliminarGracias, Josep Mª. Tu compañía siempre es agradable.
Un abrazo.
Triunfante y alegre como la novena sinfonía de Beethoven. La verdad, no sé qué más puedo añadir. Un abrazo. Franziska
ResponderEliminarNo sé si merece tanto el poema, Franziska. Me parece muy bonito lo que dices y agradezco que unas tu voz a la música que se oye en mi árbol, cada vez más ramificado con la amistad que recibo.
EliminarQue pases un excelente fin de semana.
Un abrazo.
gracias querida Fanny siempre agragas tu coletilla a mi comentario con plena sabiduria y cariño a la vez ...¿que seria de la vida sin cariño ...sin amor y sin musica y letras que penetren al alma...no me paso es que hoy estoy blandita...
ResponderEliminarbesos
Hay días en los que se nos ablanda el corazón y se vuelve trasparente. Señalas tres cosas muy necesarias para la vida y estoy de acuerdo contigo: Amor, Música y Letras.
EliminarMuy sensible comentario, Marina. Muchas gracias.
Un abrazo.
No hay enramado que hile las hebras con mayor ternura y sabiduría que el del corazón...
ResponderEliminarEnraizado en el alma, y en alto vuelo, es consuelo, libertad y melodía triunfal para los sentidos en nuestro día a día.
Besos, Fanny, y gracias por tu paso.
Me quedo yo también por aquí ;)
¡Bienvenida, Zarzamora! Llegas con hilos de poesía a mi enramada.Un poético comentario que recibo con afecto.
EliminarGracias por tu llegada. Seguiremos conversando.
Un abrazo.
Los poetas, afortunadamente, nunca estamos solos...
ResponderEliminarPues no sé qué te pasará con mi blog. Yo cambio mi poema cada 10 días, aproximadamente. Y nadie me ha dicho de algún problema o dificultad...
Un abrazo grande, y mi agradecimiento.
Bueno, pues ahora que sé que me espera un regalo cada diez días, acudiré a recogerlo puntualmente.
EliminarGracias, Antonio, no faltaré a la cita del poema.
Un abrazo.
preciosos versos.
ResponderEliminarMe alegro de encontrarte, Miguelo. Gracias por apreciar el poema.
EliminarEn los tratos que hace el corazón con el tiempo siempre acaba anidando la nostalgia. O a lo mejor soy yo pero es lo que pienso al leerte. Aunque sabemos que en alguno de esos nidos también ha habido alegría y mucha. Magníficos los tres versos finales. El aire se llena de música coral
ResponderEliminary todo lo diverso es uno
en mi corazón.
Claro que el tiempo anida nostalgia, pero no es corrosiva sino dulce, precisamente por la música coral de tantas voces que suenan dentro del corazón.
EliminarGracias, S, me gusta tu percepción del poema y el comentario.
Un afectuoso saludo.
Ese coger de aquí y de allá es lo que a la larga nos hace ser persona con ideas propias y propios sentimientos.Y es ahí, en el corazón, donde se acumula parte de lo sentido y aprendido. El resto, se supone que se guarda en la cabeza...
ResponderEliminarEl simbolismo de las ramas de un árbol me ha parecido muy adecuado para explicarlo.
Otro bello poema, Fanny.
Abrazos.
Somos un poco de todos. Algunas cosas las guardamos en el corazón y otras en la cabeza. Ahora que te conozco, ya tengo un poquito de ti. Gracias, amigo.
EliminarUn abrazo.
Con el tiempo, tus palabras tejen el tapiz de mis tardes, de parte de mis noches, de la métrica de mi necesidad, como te dije hace unos cuantos poemas. Con el tiempo, digo, tus palabras anidan en mi cabeza, dan alas a esos pájaros que hacen las maletas, vacían el nido y se mudan. Y se van con la música de su trinar a otro sitio. Con el tiempo, digo, tu poesía es el lugar al que quiero llegar. Así.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mario
Recuerdo todos tus comentarios, Mario, "la métrica de tu necesidad", "las palabras que se quedan cantando en tu cabeza"...y todo lo dicho con hermoso sentimiento; soy vulnerable a la prosa poética e intimista de tus comentarios y te has convertido en un amigo necesario cuya voz anida en una de las ramas de mi árbol.Reconozco su música y en ella me recreo.
EliminarCelebro haberte encontrado. Enriqueces mi blog y me pones alas. Gracias.
Que mis poemas sean un dulce que acompaña tu café.
Un abrazo