He abierto mi ventana y una bandada de palabras ha emprendido el vuelo buscando un lugar cálido donde vararse, donde tomar aliento para seguir el vuelo.Son palabras nómadas,sin patria; palabras que vuelan con el viento en el espacio sin fronteras de Internet.
Cuando pasen por tu jardín, no les niegues los frutos de tu árbol ni el agua de tu fuente, pero no intentes atraparlas. Déjalas seguir volando…
Por una vez, estreno los comentarios. A mí lo que me llama la atención es como se comunican los perros en el silencio de la noche. Cuando todo está en silencio, ellos ladran y nos transmiten sus emociones.
Uno de los errores más comunes de los que escribimos haikus es el mensaje explícito, ese relato que niega la capacidad de sugerencia, y es precisamente ahí, en el juego de manos de la ambigüedad, donde se esconde el sentido último de un buen haiku. El tuyo de hoy, con ese verso final que ejemplifica lo que digo, es un elogio a la estrofa. Enhorabuena, querida Fanny.
Hola, FG. He estado celebrando la verbena de S. Juan; aquí es una fiesta muy popular que reúne a familias y amigos alrededor de una hoguera y también para disfrutar de la noche tirando petardos. Acabo de regresar y me he alegrado de encontrarte, pues sigo sin recibir tus entradas y eso me dificulta la comunicación contigo.
Gracias por apreciar el haiku. Cuando se está en el campo, el ladrido de un perro, tiene algo de misterio al romper el silencio.
A veces los perros ladran de sentimiento ...ahora tratandose de un haiku ,a-lomejor es que llaman a alguien. Te escribo desde un alto de montaña... hoy comemos 26 personas en una cabaña muy rustico todo,pero me gusta y con musica. y un agua muy buena. Fanny para ti un gran abrazo. Marina
¡Cuánto me alegro de que estés acompañada de tantas gente amiga en la montaña; un lugar donde la amistad adquiere alta solidaridad. Y si además acompaña buena música y el agua deliciosa...No dudo de que has pasado un excelente día. Los perros ladran de sentimiento porque los tienen aunque hay gente que no lo cree. Es su forma de comunicarse.A mí me gustan muchos los perros.
El ladrido del perro se adueña de la noche y la llena de misterio y presagio...Mi felicitación y mi abrazo por tu buen hacer, Fanny. Feliz semana, amiga. M.Jesús
Porque, como digo en el comentario anterior, también el silencio es frágil y fugaz, como todo en la vida.Se disfruta mientras se puede, pero en cualquier momento se nos rompe.
Una visión muy personal, Amando. Y me gusta esa lectura, aunque no coincide con mi intención. Cundo se siente el silencio a solas, en la noche, el ladrido del perro puede trasmitir compañía.
Hola,Llorenç. Yo también he regresado hace un rato. Supongo que, como yo, has pasado una "revetlla de S.Joan" animada u ruidosa. He estado con amigos a los que gustan los petardos. A mí no me gusta el ruido, pero sí las formas coloridas que se encienden en el espacio.
Gracias por venir a leer mis versos y que te hayan gustado.
Hola buenos dias...quiza los perros ladraban en la noche silenciosa esperando el fuego de San Juan,ellos tienen mucho instinto. Feliz dia.abrazos Fanny Marina
Por una vez, estreno los comentarios. A mí lo que me llama la atención es como se comunican los perros en el silencio de la noche. Cuando todo está en silencio, ellos ladran y nos transmiten sus emociones.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pedro
Parece que quieran decirse algo.En la ciudad, debido a otros ruidos, no es tan impresionante como en la montaña.
EliminarGracias, Pere. Me alegro de encontrarte aquí.
Un abrazo.
Uno de los errores más comunes de los que escribimos haikus es el mensaje explícito, ese relato que niega la capacidad de sugerencia, y es precisamente ahí, en el juego de manos de la ambigüedad, donde se esconde el sentido último de un buen haiku. El tuyo de hoy, con ese verso final que ejemplifica lo que digo, es un elogio a la estrofa. Enhorabuena, querida Fanny.
ResponderEliminarSabes apreciar esos matices esenciales del haiku, y me alegro mucho de tenerte de lector y de amigo.
EliminarGracias por tu comentario, José Luis.
Un abrazo.
¿Qué volando sigan tus palabras como esos vívidos ladridos en la noche!
ResponderEliminarExpresiva imagen, intensas palabras.
Besos
André
Hola, André. Siempre tan positivo, regalando amistad con tus palabras.
EliminarUn abrazo.
Se rompe el silencio, y desde luego tú lo expresas de una forma increíble en tu haiku.
ResponderEliminarFeliz domingo!!!
Hola, FG. He estado celebrando la verbena de S. Juan; aquí es una fiesta muy popular que reúne a familias y amigos alrededor de una hoguera y también para disfrutar de la noche tirando petardos.
EliminarAcabo de regresar y me he alegrado de encontrarte, pues sigo sin recibir tus entradas y eso me dificulta la comunicación contigo.
Gracias por apreciar el haiku. Cuando se está en el campo, el ladrido de un perro, tiene algo de misterio al romper el silencio.
Un abrazo.
A veces los perros ladran de sentimiento ...ahora tratandose de un haiku ,a-lomejor es que llaman a alguien.
ResponderEliminarTe escribo desde un alto de montaña... hoy comemos 26 personas en una cabaña muy rustico todo,pero me gusta y con musica. y un agua muy buena.
Fanny para ti un gran abrazo.
Marina
¡Cuánto me alegro de que estés acompañada de tantas gente amiga en la montaña; un lugar donde la amistad adquiere alta solidaridad. Y si además acompaña buena música y el agua deliciosa...No dudo de que has pasado un excelente día.
EliminarLos perros ladran de sentimiento porque los tienen aunque hay gente que no lo cree. Es su forma de comunicarse.A mí me gustan muchos los perros.
Un abrazo.
Porque el ladrido rompe el silencio de la noche .
ResponderEliminarHola, Amapola Azzul. Gracias por detenerte a comentar.Me alegro de encontrarte.
EliminarSaludos.
Guao
ResponderEliminar¡¡ "Guao"!!...¡¡Miauuu!!
EliminarPero, a veces el perro y el gato se llevan bien.
Salud, Noel
Seguro que no.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola, Rafa. Gracias por leer y dejarme unas palabras.
EliminarUn abrazo.
El ladrido del perro se adueña de la noche y la llena de misterio y presagio...Mi felicitación y mi abrazo por tu buen hacer, Fanny. Feliz semana, amiga.
ResponderEliminarM.Jesús
Eso es, Mª Jesús. En una noche silenciosa, el ladrido de un perro, suena especial.
EliminarHasta el silencio es frágil, efímero; cualquier leve sonido puede romperlo.
Un abrazo.
Alguna vez también me ha sucedido.
ResponderEliminarUn abrazo.
Porque, como digo en el comentario anterior, también el silencio es frágil y fugaz, como todo en la vida.Se disfruta mientras se puede, pero en cualquier momento se nos rompe.
EliminarUn abrazo.
Escapar del silencio, buen pronóstico para cualquier noche.
ResponderEliminarAbrazos, siempre
Una visión muy personal, Amando. Y me gusta esa lectura, aunque no coincide con mi intención. Cundo se siente el silencio a solas, en la noche, el ladrido del perro puede trasmitir compañía.
EliminarGracias por tu comentario. Me encantó tu sentir.
Un abrazo.
Hola Fanny, ya estoy de regreso, pegado a tus versos y a los haikus, como es natural en ti maravillosos....
ResponderEliminarUn abrazo....
Hola,Llorenç.
EliminarYo también he regresado hace un rato. Supongo que, como yo, has pasado una "revetlla de S.Joan" animada u ruidosa. He estado con amigos a los que gustan los petardos. A mí no me gusta el ruido, pero sí las formas coloridas que se encienden en el espacio.
Gracias por venir a leer mis versos y que te hayan gustado.
Un abrazo.
Hola buenos dias...quiza los perros ladraban en la noche silenciosa esperando el fuego de San Juan,ellos tienen mucho instinto.
ResponderEliminarFeliz dia.abrazos Fanny
Marina
Buenos días, Marina.Gracias por tan temprana visita.
EliminarLos perros lo pasan muy mal con los petardos y no solo ladran sino que también lloran y, algunos aúllan.
Nosotros no teníamos perros. Fuimos acompañados por un coro de ranas de una charca que hay cerca de la casa. ¡Y eso me gusta mucho!.
Un abrazo.
Me gustan los ladridos de los perros que irrumpen en mis noches. Odio los ladridos de las personas que interrumpen mis noches...
ResponderEliminarGracias, otra vez.
Mario
¡Muy bueno, Mario! Hay ladridos y ladridos. Los segundos son los más desagradables tanto de día como de noche.
EliminarGracias a ti por detenerte a dejar un comentario.