Ríos,
árboles ,montañas,
prados
floridos, líquenes y musgos…
en
vosotros mi alma se reposa .
Hay
sombras veloces a lo lejos,
entre
el cielo y la tierra
que
temblorosa habito.
Arropadme
en vuestro seno,
no
permitáis que deje de sentir
los
colores y sonidos del mundo,
ni
que mi voz renuncie a las palabras
con
las que siempre os hablo.
No
permitáis que el frío
se
detenga en mis umbrales
acechándome y me vuelva de hielo.
Prometed
acudir a salvarme
si
en hielo me convierto.
Mi
bosque amado,
no permitas que
un día
me devore la noche.
Abril,013
Precioso poema. Fanny.
ResponderEliminarBesos.
Como siempre, un placer encontrarte por aquí.Gracias.
EliminarUn abrazo.
pues ya es de noche. Abrígate de las sombras
ResponderEliminarAbrigada estoy, a la luz de la luna.
EliminarDuerme bien.Felices sueños.
Entonces le estás pidiendo a la poesía que nunca te abandona Fanny y seguro de que nunca lo hará.
ResponderEliminarUn abrazo.
Más o menos, es eso, pero sobre todo, que nada humano me sea indiferente.
EliminarUn abrazo.
Miedo a "volverse de hielo"... ¡ Una preciosa metáfora de la insensibilidad para amar el mundo, con sus colores y voces diferentes!...Hay en tus versos amor a la Naturaleza y al mundo. Deseos de esperanzas y de sueños.
ResponderEliminarMi felicitación.
Bonito comentario. Gracias, Celeste. Pareces caído del cielo con tu bello mensaje de esperanzas y sueños.
EliminarFeliz Año 2014.
Un abrazo.
Por lo que he leído en este blog, no creo que puedas "volverte de hielo". Me gusta tu poema y la invocación a la naturaleza como salvadora de esa hipotética pérdida de sensibilidad hacia los colores y voces del mundo.
ResponderEliminarBuenas fiestas.
Me llega muy amistoso tu comentario, Antón. Gracias. Con las palabras amigas me abrigo del hielo de la vida.
EliminarUn abrazo.