A mi amigo Luis
que sueña en amarillo.
¡Y
qué importa
la
fatiga del camino,
el
paso vacilante,
las
gafas empañadas
y
la camisa empapada de sudor!...
Qué
importa
si
hay un instante en el que hallas,
en
un recodo imprevisto ,
la
belleza del mundo,
su
color, su música, su materia pura...
¡Qué
importa!
Si ese instante te desvela
el
lado bueno de la vida
y
comprendes la importancia
del
abrupto camino que recorres.
Qué
importa
haber
dejado atrás los veinte años,
si
al caminar dialogas con la Tierra
y
aún gozas de ese instante
en
que descubres la belleza
agazapada
en los rincones del camino
y
el corazón te golpea,
las
lágrimas acuden silenciosas
y
tus sueños se tiñen de amarillo.
Agosto,2012
A pesar de la nostalgia , has conseguido un bello poema abierto a la esperanza.
ResponderEliminarBesos.
André
Hola, André.
EliminarSiempre dejo la puerta abierta -o entreabierta- a la esperanza. ¿Cómo vivir de otra manera?.
Gracias por tu visita y comentario.
Un abrazo
Fanny
Puro sentimiento interior... precioso
ResponderEliminarUn beso
Aunque Pessoa dijo que "el poeta es un fingidor"...todo lo que escribo son sentimientos vivos y sinceros que se apoderan de mí en un momento u otro. Claro que yo no soy poeta; solo pongo por escrito los sentimientos de un instante.
EliminarGracias por tu visita y por tus palabras amigas.
Un abrazo.
Es verdad que sueño en amarillo.
ResponderEliminarEs verdad que la belleza está escondida en cualquier recodo del camino, que impregna las cosas sencillas y corrientes;
por eso ahora la encuentro sin buscarla,
solo tengo que señalarla con el dedo,
solo tengo que leer lo que tu escribes,
solo tengo que sentir lo que tu sientes.
Un beso agradecido.
¡Ah!...Qué alegría saber que sigues soñando en amarillo y que la belleza que buscas la encuentras también en las cosas sencillas y artesanas como mis versos. Al publicar aquí este poema que un día te dediqué, renuevo la emoción que me causó tu bello escrito inspirador de este poema.Sentí lo que tú sentías, como hoy sientes lo que yo siento en el poema. Gracias, Luis. Sigue soñando en amarillo.
EliminarUn beso amarillo
¡si Fanny! ¡que importa todo lo demás si es que nos enfocamos en la vida y vivimos a pleno sus bellos instantes!
ResponderEliminarGracias por compartir el sentir de este poema.
EliminarGracias por tu visita, que es, también un bello instante para mí.
Un afectuoso saludo.
si al caminar dialogas con la Tierra
ResponderEliminary aún gozas de ese instant
en que descubres la belleza
agazapada en los rincones del camino
Insisto en que debes reconocerte poeta. Lo tuyo es buena poesía.
Tu visita me llena de alegría y tus elogiosas palabras alientan a seguir caminando en este terreno en el que aún tengo dudas.
EliminarTe detienes en una estrofa necesaria: saber encontrar la belleza que, aunque existe, a veces está escondida.
Sé que tú eres de los que saben mirar en profundidad y encontrarla.
No puedo "reconocerme poeta"; lo reconozco, con sincera humildad, cuando leo a mis poetas preferidos.
Un abrazo.
Excelente, Fanny; un gran poema lleno de filosofía. El saber encontrar el lado bueno de la vida, su belleza, su música, su materia pura"...en los rincones del camino".
ResponderEliminarMi enhorabuena.
Saludos.
Antón, gracias por tu paseo por mi blog. Ya te siento amigo. Me gusta mucho que aprecies este poema porque es muy especial para mí y lo escribí en un momento también especial, por lo que le tengo cariño.
EliminarUn afectuoso saludo.
Me gustó ese verdor esperanza en tu poema…muy lindo lo que dices.
ResponderEliminarUn gusto estar en tu casita
Abrazos Fanny.
¡¡Bienvenida a mi blog!! Es un placer poder comunicarme contigo como si no hubiera distancia entre nosotras.
EliminarEspero que te sientas bien en esta casita rústica pero acogedora.Ven de vez en cuando y tomaremos un café o un té.
Gracias por tu visita y por tus palabras.
Un abrazo.
Enhorabuena por este poema, Fanny. Mientras uno encuentre la belleza escondida en los rincones de la vida, no importará "haber dejado atrás los veinte años".
ResponderEliminarUn saludo.
Celeste
Cuando uno sabe encontrar esas cosas ocultas en los rincones de la vida, está vivo, es joven, independientemente de lo maltrecho que esté su cuerpo.
EliminarMe ha gustado tu comentario. Gracias.
Un saludo afectuoso.