miércoles, 9 de octubre de 2013

Tu cuerpo otoñal




                    Ha entrado el otoño en tu cuerpo
                    y ha puesto óxido en tu piel,como en las hojas
                    del roble que permanecen en las ramas,
                    mas tienen tus besos el dulce sabor
                    a caramelo de miel, y en tu mirada
                    hay destellos amarillos sugerentes.

                    ¡Miles de días en tu cuerpo contenidos.
                    Decenas de inviernos gestando primaveras.
                    Miles de veces emprendió la aventura
                    de vivir y seguir vivo abrigando los sueños!

                    ¡Cuánta música por escuchar en tu alameda.
                    Cuánta tierra fértil descubro todavía.
                    Cuánta vida naciendo silenciosa
                    bajo la capa de hojarasca de tus años !



                      8 de octubre,013



 
 
 
 



      

 

 

 

6 comentarios:

  1. Fantástico homenaje a las personas mayores."¡Miles de veces emprendiendo la aventura de vivir y seguir vivo abrigando los sueños!".¡Qué verso más profundo!.
    Me gusta la reivindicación de la vejez como tierra fértil bajo cuya hojarasca,hay vida "naciendo silenciosa".

    Mi enhorabuena.

    Saludos.

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    1. Hola, Inés.Me gusta que te hayas detenido en este poema. Creo que,para las mujeres, tiene un hondo significado, ya que la sociedad las acosa con su obligada belleza, y les cuenta, implacable, las arrugas y demás signos de madurez.También a los hombres, pero mucho menos. ¿No crees?

      Un amistoso saludo.

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  2. Me gusta mucho este poema a la madurez. ¡Cuánto por descubrir bajo la hojarasca!, Tienes razón. Los frutos maduros son dulces.

    Saludos.

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    1. Celeste, agradezco tu paso por aquí y que no te vayas sin dejar unas palabras.
      Bueno, frutos maduros los hay de todos los sabores, pero no hay que menospreciar el potencial de ternura, e incluso de pasión, que hay en "el cuerpo otoñal".

      Saludos.

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  3. Con mucha sensibilidad nos dices que un cuerpo otoñal puede amar y ser amado. "Cuánta vida naciendo silenciosa bajo la hojarasca de los años!"...¡Excelente afirmación!.

    Saludos.

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    1. Pues sí. Eso creo. La capacidad de sentir, de desear, de emprender y de comunicación, no son exclusivas de la juventud, son atributos del "alma" (para entendernos) que se mantienen vivos según la personalidad, independientemente de los años.

      Gracias por detenerte a comentar.

      Saludos.

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